NOVELA
LOS ABISMOS
Pilar Quintana (Alfaguara - Buenos Aires)
Con una prosa ligera y lúcida, Quintana nos adentra en la memoria de una niña que intenta comprender su historia familiar. Claudia narra al detalle, lugares, sensaciones, pensamientos, con la ingenuidad propia de su edad y, a pesar de ello, advierte la atmósfera desdichada que la rodea. La protagonista sostiene una voz narradora que bucea en la oscuridad de las relaciones humanas, incluyendo la de sus padres, abrazada desde siempre a un mundo de mujeres. La niña escucha, reflexiona y aprende, junto a su muñeca Paulina, en una casa donde todos son adultos, pero ella se encuentra a la intemperie. Testigo invisible de la estirpe de mujeres perseguidas por la muerte que no logran apartar.
El Cali verde y brutal como la selva, habla a través de los ojos de la protagonista (“Me encantaba correr por la selva, que las plantas me acariciaran, quedarme en el medio, cerrar los ojos y escucharlas”) y el recuerdo tenaz de la voz de la madre repitiendo lo que escuchó de su abuela (“Una vez, en el club, ella oyó cuando una señora le preguntó a mi abuela por qué no había tenido más hijos.—Ay, mija —dijo mi abuela—, si hubiera podido evitarlo, tampoco habría tenido a esta. Las dos señoras soltaron la carcajada”).
La escucha de los niños, que torpemente pensamos que no entienden (“Mi mamá siempre estaba en la casa. Ella no quería ser como mi abuela. Me lo dijo toda la vida”). ¿Pueden las vivencias de la niñez marcar el destino de este linaje de mujeres? Una madre ausente, un padre que trabaja todo el día, el miedo al abandono y la orfandad.
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